Todos nosotros tenemos un determinado objetivo a alcanzar en nuestras vidas. Claro que llegar a la meta no es en absoluto un camino de rosas. La vida está llena de obstáculos, los cuales debemos ser capaces de superar y seguir hacia delante; de ahí que hayas llegado hasta aquí y quieras conocer 4 claves para avanzar en tu vida.
De nosotros depende que superemos dichos obstáculos con mejor o peor actitud; estos van a estar ahí de la misma manera. Si optamos por mantener una actitud positiva, conseguiremos librarlos con una sonrisa y con la idea de que somos capaces de enfrentarnos a todo, y superarlo. Si en cambio preferimos mantener una actitud negativa y centrarnos única y exclusivamente en lo que creemos que es nuestra mala suerte, el camino hacia nuestro objetivo se convertirá en una tortura e incluso puede que no lo consigamos.
¿Por qué la “actitud” está por delante de la “aptitud” a la hora de avanzar en la vida?
Se habla muchísimo sobre la actitud y la aptitud. Pues bien, es importante tener en cuenta que las aptitudes son algo innato al ser humano; por lo tanto, tienen un determinado límite, el cual es diferente en cada persona. Si bien es cierto que a lo largo de la vida podemos entrenar nuestras aptitudes para mejorarlas y exprimir todo nuestro potencial al máximo, nunca vamos a ser capaces de superar nuestro propio límite, impuesto por la propia genética.
No obstante, una actitud positiva es ilimitada; no existe ningún tipo de barrera para una personalidad trabajada, con una autoestima alta y unos valores envidiables. En el camino de la vida podemos ser tan positivos como queramos, sólo es necesario saber cómo hacerlo.
Las 4 actitudes que no deberían faltar en tu equipaje para avanzar en la vida
Hay una serie de actitudes que todos deberíamos trabajar para progresar por el camino de la vida, que puede ser tan hermoso como nosotros consideremos.
• Actitud ante el miedo
El miedo es algo que no podemos controlar. Lo que sí está en nuestras manos es la manera en la que aceptamos el miedo.
Es importante que seamos capaces de marcarnos retos y que estemos continuamente superando nuestras propias marcas. Por lo tanto, lo mejor que podemos hacer es no quedarnos atrás y ser capaces de enfrentarnos a nuestros miedos, poco a poco; dar un paso no es fácil y puede parecer que no es demasiado pero, míralo a la inversa: ese paso es uno menos que te queda para perder algo de ese miedo que todos tenemos; además, enfrentarte a las situaciones que te incomodan te hace mucho más fuerte.
• Actitud ante el rechazo
Por desgracia, el rechazo sigue estando presente en las vidas de todos de nosotros. La mejor actitud que podemos tomar es demostrar al resto del mundo todo lo que están dejando de ganar al no contar con nosotros. Todos tenemos puntos a mejorar, pero también una serie de cualidades que no encontramos en los demás, ¡¿cuáles son las tuyas?!
Debes valorarte como persona, como madre o padre, como hijo, como hermano, como profesional, como amigo… Eres importante para muchas personas, para cada una de ellas por motivos diferentes; por lo tanto, es necesario que, si te sientes incómodo en las situaciones de rechazo, conozcas y trabajes todo aquello que eres capaz de ofrecer a los demás, incluso lo que no te das cuenta.
• Actitud ante el éxito
A lo largo del camino de la vida vamos a encontrarnos con muchísimos éxitos que nos van ayudando a avanzar.
Ante los mismos, no debemos quedarnos con la idea de que lo hemos logrado todo; siempre tenemos que intentar superarnos a nosotros mismos.
Por supuesto, la condescendencia no es una opción sana; todos hemos podido pasar por malas situaciones en nuestra vida y el hecho de que en un determinado aspecto nos vaya mejor no significa que los demás no sean importantes.
Por otro lado, es importante tener en cuenta que no sólo de lo malo se aprende; aprovecha esos éxitos conseguidos, estúdialos y valóralos. Sólo de esta manera podrás saber qué has conseguido, por qué, qué te ha faltado, qué has hecho bien… Todo ello de cara a mejorar en situaciones similares.
• Actitud ante el aprendizaje
La vida es un continuo aprendizaje. Es clave que mantengamos una actitud abierta a todo lo que nos rodea para poder percibir todo el conocimiento. En cualquier esquina podemos aprender algo nuevo que nos enriquezca de una manera u otra. Jamás debemos cerrarnos en este aspecto porque el conocimiento es poder, siempre.
Si deseas profundizar más en este tema, te aconsejo el libro Frankl, Victor; El hombre en busca de sentido. Con él vas a conocer la experiencia de primera mano de alguien que sufrió la angustia de vivir en los campos de concentración y aprenderás cómo afrontar la realidad en sus aspectos más crudos.